martes, 6 de mayo de 2008

¿Dónde se sacan los permisos para volverse a enamorar?



Han pasado ya 8 meses de lo de "A", y si bien es cierto me siento mucho mejor, más centrado y tranquilo, pues aún hay cosas que me mueven, y me terminan incomodando al saber de ella, por supuesto prefiero hacer caso a lo que algunos amigos (sobre todo amigas) llaman el "orgullo de macho herido" y es que al saber algunos de sus planes, o enterarme de su propia boca de la vida en común que lleva con su novio "el más lindo del mundo", pues originan una cierta molestia que podríamos denominar como ¿"pica"?

Sobre todo al notar entre las últimas visitas a mi perfil del Hi5 que fue ella, la que hace dos días se dió una vuelta por ahí, pese a mis auto-advertencias de no visitar el suyo entré, y hubo algo que me encolerizó, no tanto por la escena en sí, pero sí por un objeto en particular. La postal: "A" y su novio en campamento de Semana Santa dentro de una carpa, echados sonrientes en... MI COLCHÓN INFLABLE!!! digo, ¿por qué no compra uno el pata ese? No cuestan mucho. En fin! la verdad, preferí hacerme de la vista gorda y no comentar absolutamente nada de esta molestia, que al fin y al cabo, es bastante estúpida.

Hace una semana, una amiga psicóloga me decía lo importante que era el ilusionarse para un ser humano, sobre todo después de haber tenido una pérdida o un desengaño. Sorprendentemente este hecho para ella demostraba la recuperación de la confianza, que era la base de una buena reestructuración emocional. Por otro lado "C" (hemos recuperado nuestra amistad y está mucho más fuerte ahora) me decía que la capacidad de ilusionarse era innata al ser humano, que para eso estábamos en este mundo.

He estado cuestionándome bastante estas últimas semanas sobre una emoción creciente que se ha convertido poco a poco en ilusión, y la verdad creo que no tiene mucho asidero para serlo, pero está ahí, palpitante y presente. Y es que estando, a relativamente, poco tiempo de haber terminado con "A" dudaba de estar listo para iniciar una nueva relación con alguien, ¿es poco tiempo?, ¿es el tiempo justo?, ¿es así como se maneja "el luto" del que tanto hablan los psicoanalistas? Pues dudaba y he ahí mis cuestionamientos.

Creo que básicamente el que tenga que preguntarme que tan bien o mal esté el estar ilusionado nuevamente, viene de ciertos hechos y actitudes como los descritos en los primeros párrafos. Estoy lo bastante alejado ahora de "A" (años luz como me gusta decir) como para estar lo suficientemente tranquilo, nada voluble, y en mis cabales, y la verdad me siento, como que muy en buena onda con esta nueva etapa. Pero, como lo dije antes, desconozco a fondo qué asidero pueda tener esta ilusión. Es decir, esta chica en particular, es bien, bien especial.

¿Cómo lo descubrí? Pues cuando me di cuenta que ella era la primera persona en quien pensaba al levantarme y la última cuando estaba por dormir. Y si puedo ser aún más sincero, diré que es mostro estar solo (te encuentras contigo mismo, lo que es sano) pero habían noches y domingos por la tarde que se me hacían eternos y muy solitarios. ¿Me ilusiono por no querer seguir solo?, la verdad lo dudo, porque en este caso, tratándose de ella, y el como llegamos a encontrarnos, pues no.

Vuelvo a mi amiga psicóloga, cuyo parecer es que realmente todos estos cuestionamientos no tienen validez, porque me ve bien encaminado, con muchas cosas superadas, además ve en esta chica (la conoce) un tipo que nunca me llamó la atención, y por lo mismo lo ve muy saludable, y ventajoso para mi, digamos como un "cambio de aires". Creo que está bien ilusionarme en suma, por todo lo antes expuesto, pero especialmente porque no existe en este mundo la dependencia donde se tenga que sacar el permiso para volverse a enamorar.

Canción para volver a ilusionarse, o en todo caso una declaración directa, para ella.

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